Día 20.
El lunes me hizo Marta Robles una entrevista sobre el libro en EFE. Resultó muy interesante y muy amena; y si lo fue para mí lo sería también para quienes lo escucharan o lo escuchen más adelante. No es casualidad, Marta es una mujer inteligente y atenta con sus invitados, lo que permite una charla muy cómoda pero a la vez incisiva sobre las cuestiones principales. Entre ellas a Marta le sorprendió en particular la alusión que hago en la novela a la supervivencia del viejo “derecho de pernada” medieval.
-¿De verdad aún existía en España en 1958 el derecho de pernada?, me preguntó con sorpresa y dolor.
-Sin denominarse de ese modo y de una forma más sutil, pero a fin de cuenta claro que existía, respondí. Y aún hoy sigue existiendo en muchos lugares del mundo. Allí dónde el poder de ciertos hombres les permiten actuar con impunidad mientras las mujeres y adolescentes pasan hambre y miseria, allí hay siempre, por desgracia, abuso y corrupción de menores.